Según un estudio de la Universidad de Harvard (Estados Unidos) no desayunar o saltarse esta comida aumenta el riesgo de ataques al corazón o padecer de enfermedades coronarias.

Así pues que este estudio corrobora la importancia de desayunar para que la salud no se debilite.

Tras analizar durante décadas exámenes médicos y cuestionarios sobre la frecuencia alimentaria de más de 25.000 hombres, en edades comprendidas entre los 45 y los 82 años, los expertos concluyeron que saltarse el desayuno regularmente aumenta el riesgo de ataque al corazón o enfermedad coronaria mortal. Concretamente, los hombres que omitían el desayuno tenían un 27% más de riesgo de sufrir un ataque cardíaco o morir a causa de enfermedad coronaria que los que sí desayunan.

Los que no tomaban el desayuno eran más jóvenes y menos activos físicamente y, además, tenían mayor tendencia a fumar y a tomar alcohol que los que no dejaban de lado la primera comida del día. Como apunta el director del estudio, Leah E. Cahill, saltarse el desayuno se asocia a otros factores de riesgo como la obesidad, la presión sanguínea elevada, colesterol alto y la diabetes, lo que a su vez puede conducir a un ataque al corazón.

Con estos datos en la mano, razón no le falta para hacer hincapié en abandonar el hábito de no comer nada al levantarse, y recomendar a la población desayunar en condiciones. Incorporar alimentos saludables –fruta fresca, frutos secos y cereales integrales– en el desayuno es una manera de asegurarnos de obtener suficiente energía y un equilibrio óptimo de nutrientes: proteínas, hidratos de carbono, minerales y vitaminas.